Ya nadie recuerda

El 01.06 se dieron las listas definitivas de los 32 equipos del mundial, se conocieron los 23 elegidos que defenderían en el rectángulo de juego las selecciones nacionales.

La ausencia de algunos nombres, como en ocurre cada cuatro años, generó polémica y grandes despliegues mediáticos.



En Brasil la no convocatoria de Pato, Adriano y Ronaldinho despertó fuertes críticas a Dunga. Los tres súper astros no quedaron entre los 23 por distintos motivos, sin embargo, los triunfos en la Copa Confederaciones y la Copa América solapó, un poco, las voces contrarias.

Si esa es la fórmula del éxito, que se queden fuera, no importa.

Caso contrario ocurrió en Argentina, una tormentosa ronda clasificatoria y falta de identidad eran algunos de los señalamientos que Maradona y los suyos recibían. La pelea de Riquelme con el Diego y la supuesta conspiración entre directivos de la federación argentina y el DT para sacar a Basile eran parte del ambiente pre mundial que acompañó a la bicampeona de mundo.

A esto se sumó la exclusión de Estaban Cambiasso y Javier Zanetti dos baluartes del triple coronado Inter de Milán. Dos jugadores que mostraron un excelso nivel durante la demandante temporada Europea y que por rendimiento podían obtener un cupo entre los 23. Dejando por fuera la no convocatoria de Fernando Gago, del Real Madrid.

Maradona prefirió a Palermo, Otomendi, Jonás o Verón por mencionar algunos nombres y los especialistas afirmaban que se había cometido una locura. Sin los dos interistas la albiceleste estaría incompleta y no tendría identidad.

Que la personalidad del Cucho Cambiasso o la polivalencia de Zanetti eran valores que no se podían dejar por fuera, pero así pasó. Se quedaron fuera de la selección y muchos esperaban los peor, más allá, de las figuras de de media cancha para arriba que tiene Argentina.

La poca fe en Maradona, el director técnico de la selección, eran evidentes. Peron con fútbol las críticas se convirtieron en halagos

Argentina cumplió una fase de grupo muy buena, mostrando el mejor fútbol de la primera parte del mundial. Con Messi dando, otra vez, muestras de la genialidad que poseen sus toques, la fuerza de Tevez o la eficacia goleadora de Higuaín.

Todavía los muchachos del Diez dejan algunas dudas en la defensa, y la poca capacidad futbolística de sus adversarios no termina de demostrar cuál es la verdadera profundidad de la retaguardia y temple del grupo.

Pero más allá de eso, siguen sorteando rivales y cada vez se acercan más al séptimo juego. ¿Le alcanzará a este grupo para disputar el gran juego? Eso tendrá una respuesta parcial el 03.07 cuando Alemania rete a Maradona y los suyos.

Ya nadie habla de los ausentes, ellos son comentarios lejanos de algunos necios y hombres de poca fe. El presente brilla y el sueño se hace realidad a cada juego.

Ya nadie recuerda al Cucho o al Pupi y nadie notará su falta mientras la victoria acompañe a los elegidos.